viernes, 1 de mayo de 2009

"In Memoriam" de Juan, mi profesor.

Ayer sonó mi teléfono, un amigo, también alumno tuyo, me comunicaba que nos habías dejado… Un duro golpe que me costó digerir; no hacía mucho coincidí contigo en el puerto enfrente de tu barco, junto con uno de tus hijos, también de nombre Juan Antonio; y te vi como siempre cargado de proyectos e ilusiones y trabajando para mejorar tu velero.

Recuerdo cuando decidí sacarme el titulo de Patrón, me hablaron de ti y de tu Academia; la grata impresión que sentí al entrar en clase y tu franqueza en el trato. Tus orígenes y recuerdos de niñez “vascos” como los míos, nos unían e identificaban y nunca reñidos con tu sentir profundamente “eivissenc”.

Tus clases “Juan”, siempre fueron especiales, cargadas de anécdotas y “sucedidos” que daban pinceladas a las duras clases de Estabilidad de Capitán. Y haciendo un alto, un paréntesis, nos regalabas historias con matices marineros de tu paso por la Armada, de tus singladuras en el “Juan Sebastián Elcano”, o una recalada en un puerto de algún lejano país. Historias varadas en el tiempo, que iluminaban una farragosa asignatura y servían como un paréntesis para poder retomarla de nuevo.

¡Quien no te tomo cariño! Además de profesor, fuiste nuestro amigo y compañero. Alimentaste esta amistad; como cuando hacías un alto en la clase para alimentar el fuego bajo que caldeaba el aula, en esos inviernos ibicencos.

Siempre rodeado de futuros proyectos de patrones y capitanes, que veían en ti un modelo a seguir; de persona íntegra, honrada, con porte marinero marcado por una “impronta” de tu paso por la Armada, donde llegaste a ejercer como Capitán de Navío.

Hoy repasando unos archivos de imágenes, he encontrado la fotografía que ilustra este escrito. Una salida en tu velero, unas prácticas de Capitán contigo, rodeado de tus alumnos en la popa de tu barco; en un ambiente distendido incluso paternal, desgranando tus conocimientos.

He tenido el honor de conocerte, poder disfrutar de tu amistad y al mismo tiempo recibir tus enseñanzas marineras. Descansa en paz allá donde te halles, que seguro será cerca de tu mar.


Buenos vientos en la travesía.

1 comentario:

  1. Gracias Javier por tan entrañable texto , para mí también ha sido un privilegio conocer a Juan y poder recibir sus enseñanzas y lo más importante recibir esa pasión por el mar que transmitía en esas historias que contaba , como gran conocedor de lo que pasaba en nuestro entorno , era un apasionado de Ibiza y de Sant Antoni ,recuerdo con que pasion contaba las características y encantos de esta bahia .

    Buenos vientos en la travesía.

    ResponderEliminar